Esperando a la chica del comedor

*Caminaba con los jardines con las manos metidas en los bolsillos de mi pantalón y con el Ipod a todo volumen para no escuchar los comentarios de las personas al verme pasar aunque no había mucha gente debido al tiempo. Cuando hacia mal tiempo o llovía no podía quedarme en la habitación, había comprobado que siempre que hacia esos días y me quedaba en la habitación me daba un ataque por lo que prefería mil veces mojarme entera a que me diese uno de esos ataques*

*Seguía caminando tranquilamente cuando sentí como alguien tiraba de mis cascos y giré mi cabeza para gritar al idiota que había echo eso cuando me encontré con el rostro del chico del comedor. Tragué saliva y giré de nuevo mi rostro haciendo como si no le hubiese visto y poniéndome de nuevo los cascos dando la vuelta caminando de nuevo hacia el edificio del reformatorio.*

*Sentí como me cogia del brazo haciéndome girar. El cable cayó hasta el suelo y su brazo rodeó mi cintura mientras que sus manos inmovilizaban las mías. Empecé a revolverme de nuevo intentando librarme pero era inútil, solo conseguía darle con los codos en los costados.*
-No te evito, tengo que volver dentro a que me den la medicación.
*Dije mientras le miraba a los ojos*

-Por que esa pastilla era para que me quedase dormida, la que me tienen que dar ahora es para controlar mis ataques, venga, suéltame.
*Dije sin dejar de moverme con violencia luchando por soltarme. Odiaba estar sujeta y sentirme tan débil, si había ago que odiaba en la vida era sentirme débil y con ese chico me sentía así, débil a mas no poder*

*Sentí como mordía mi cuello con fuerza y solté un grito de dolor mientras me seguía revolviendo con fuerza intentando liberarme.*
-¡Suéltame!
*Grité furiosa mientras le daba un fuerte rodillazo en la entrepierna para que me soltase y poder salir corriendo.*

*Sentí como me pegaba una bofetada y solté un pequeño grito. Me empujó hacia el suelo haciendo que me llenase toda de rabia y se sentó a mi lado como si nada. Estaba furiosa, odiaba que el novato jugase conmigo como se le diese la gana. Me levanté y le clavé el tacón con fuerza en el pecho haciéndole tumbarse y pasé por encima de él pisándole con fuerza clavando mis tacones*
-Yo también te saludaba.
*Dije mientras empezaba a caminar alejándome de allí*

*Sentí como me cogia del nuevo del brazo y me besaba de nuevo con labios y cuando se separó fui a darle una bofetada pero se fue corriendo. Sabia que lo mas sensato seria ignorarle y irme yo por mi camino pero mi orgullo pesaba mas que la sensatez en ese momento. Sabia que cuando volviese a estar atrapada entre sus brazos sin poderme mover me iba a arrepentir pero ahora no pensaba eso. Empecé a correr detrás de él completamente mojada y llena de barro.*

*Solté un bufido al escucharle y le cogi del brazo con fuerza tirando de él con fuerza para que se parase y le pegué una fuerte bofetada*
-No me vuelvas a tocar, ni a besar, ni a piropear, ni a mirar por que como lo hagas mañana serás hombre muerto cortadito a pedacitos. Quien avisa no es traidor Wyat.
*Murmuré mirando desafiante. Había estado investigando sobre el nombre de ese chico. Después de decirle aquello volví a empezar hacia el edificio*

*Me volvió a coger del brazo y solté un bufido mientras me miraba furiosa y le dí otra bofetada cuando me besó.*
-Elijo las cuatros, y como incumplas alguna de esas el que aparecerá muerto serás tu no yo y ahora suéldame o te doy otra patada en la entrepierna.
*Dije mirándole cabreada*

-Pues deberías temerlas, tú no sabes quien soy yo.
*Dije desafiante. Sentí como me daba otra bofetada agarrándome de nuevo impidiendo que me moviese y empecé a moverme de nuevo con violencia soltando un grito de dolor al sentir como me mordía, eché la cabeza hacia abajo para que no me mordiese mas. Lo de la medicación no era ninguna broma, me la tendría que tomar o empezaría a escuchar las voces, con los días lluviosos siempre me pasaban*
-¡Suéltame hijo de puta!
*Grité furiosa. Sabia que le gustaba verme enfadada pero no podía hacer nada otra eso, me estaba poniendo nerviosa*

-Capullo.
*Le contesté al sentir como me llamaba hermosa. Hice una mueca de asco al sentir como lamía mi oído y me seguí revolviendo intentando soltarme. El agua de la lluvia caía sobre nosotros que ya estábamos empapados.*
-Eres hombre muerto.

Ezequiel andaba por los jardines tranquilamente cuando oyó los gritos de Janis.. ella era como una hermana pequeña, su protejida.. y no le gustó como sonó ese grito en forma de amenaza. Corrió muy serio y los separó, empujando al chico y ocultando a Janis tras su ancha espalda.
Clavó sus ojos azules en los del chico con una mueca de asco bastante intimidatoria

- ¿qué te crees que haces?

Su cuerpo estaba empapado en lluvia y sus ojos empapados en ira. Una ira color celeste..

*Sentí como empujaban a Wyat alejándome de él y alguien se colocaba delante de mi ocultándome detrás de su espalda. Observé a Eze y me relaje mientras rodeaba su cintura con mis brazos para sentirme segura. Miré a Wyan por encima del hombro de Eze y le dediqué una sonrisa de ya te lo dije.*